Preguntas frecuentes

La caries es una enfermedad infecciosa multifactorial que se caracteriza por la destrucción de los tejidos duros del diente como consecuencia de una desmineralización provocada por los ácidos que genera la placa bacteriana a partir de los hidratos de carbono de la dieta. Si no es tratada, tras la destrucción del esmalte ataca a la dentina y alcanza la pulpa dentaria produciendo su inflamación, pulpitis, y posterior necrosis (muerte pulpar). El resultado final es la inflamación del área que rodea el ápice o extremo de la raíz, periodontitis apical, pudiendo llegar a ocasionar una celulitis o flemón.

Salvo que afecte sólo al esmalte y se pueda recuperar con una mejoría en la higiene, la alimentación e incorporación tratamientos con flúor para intentar remineralizarla, sí. La lesión a partir del esmalte, tenderá a crecer y las consecuencias de no tratarla serían desde infecciones y necesidad de endodoncia hasta la extracción de la pieza.

Hay varias técnicas que le podremos explicar en su caso concreto o cuando nos lo solicite. Además del cepillo normal manual los hay eléctricos, interdentales, seda dental, etc. Pero todos ellos requieren de un tiempo mínimo para ser efectivos. No corra en su cepillado.

Usar unos 30 centímetros de seda dental y enrollar parte del mismo en su dedo medio y el resto, alrededor el mismo dedo de la mano opuesta. Aguantar la seda entre estos dedos y los pulgares. Meter la seda dental entre los dientes con un movimiento suave hacia dentro y fuera. Nunca meter la seda dental en las encías.
Cuando la seda dental alcanza la encía, deslizarla suavemente en el espacio entre la encía y el diente moviendo la seda dental desde la encía hacia arriba y abajo. Repetir este método en todos los dientes, sin olvidar el lado posterior de su último diente.
Quien tenga dificultad en el manejo de la seda dental puede preferir el uso de otro tipo de limpiadores interdentales tales como cepillos, que su dentista le enseñará a utilizar para evitar dañar las encías.

Al menos una o dos veces al año, aunque no tenga ningún síntoma.

Es la eliminación de la placa bacteriana y manchas extrínsecas de la superficie dental. Se utilizan aparatos de ultrasonidos, chorro de bicarbonatos, pastas de profilaxis, etc. No es un blanqueamiento. Solo deben realizarla los higienistas dentales con titulación y los dentistas. Una limpieza mal hecha puede provocar daños en sus encías o en sus dientes.

Es un tratamiento que consiste en limpiar la caries de un diente y después rellenar el hueco devolviendo la forma original del diente. Los pasos de un empaste son:
-Anestesia (no siempre es necesaria).
-Limpiar de caries el diente o muela.
-Poner el empaste que puede ser negro (amalgama) o blanco (composite).
-Pulido del empaste.

Es fundamental inculcar al niño unos correctos hábitos de higiene y alimentación para evitar la aparición de caries. Pero si ya están presentes debe tratarse lo antes posible para evitar lesiones mayores y los problemas que de ellas se puedan derivar.

Las suturas son lo que la gente le llama los puntos. A veces cuando se saca una muela o cuando se hace alguna cirugía en la boca, hay que poner puntos, o sea hay que “coser” la encía para cerrar la herida.

Es un tratamiento por el cual se coloca una cofia alrededor de un diente o una muela para protegerla y evitar que se fracture. Pueden ser de distintos materiales y calidades. Para hacer una funda hay que limar el diente, tomar una medida de la boca y hacer un molde de la boca. Cuando la funda está terminada se la tienen que pegar en el diente.

Es un tratamiento por el cual durante varias visitas y previo análisis oclusal en unos moldes de su boca puestos en un articulador (aparato que sirve para simular los movimientos de su boca) se procede a ir tallando algunas cúspides que chocan de forma patológica y que produce un problema en su boca y articulación de la mandíbula. Este tratamiento no es desgastar algún diente de forma casi aleatoria sino que hay que hacer un profundo estudio del caso para poder realizarlo.